BUENOS AIRES, 23 abr (Xinhua) — El negativo impacto de la sequía en la cosecha agrícola junto a la falta de divisas y una venidera contienda electoral complican la situación del tipo de cambio en el mercado paralelo de Argentina, provocando que el “dólar blue” haya escalado más del 10 por ciento en la última semana, opinó hoy domingo el economista argentino Gustavo Neffa.
El director de la firma de análisis financiero “Research For Traders” advirtió en un diálogo con Xinhua sobre los efectos de un nuevo incremento de la cotización del dólar en la inflación, su sucesivo impacto en el sector productivo y hasta en la meta de acumulación de reservas internacionales que se ha estado conversando con el Fondo Monetario Internacional (FMI).
“Los mercados reaccionan a veces tarde pero lo terminan haciendo, el trasfondo es un nivel bajo de reservas y un muy mal año en materia de cosecha agropecuaria, el peor desde el año 2001, lo cual compromete los objetivos acordados con el FMI entre los cuales figura objetivos para la acumulación de reservas”, aseveró Neffa.
Desde el pasado lunes, el dólar en el mercado informal, incluyendo el que se adquiere a través de operaciones bursátiles, escaló en promedio un 2 por ciento diario y cerró la semana con un incremento del 10,5 por ciento, concentrando la atención de los principales analistas económicos y de medios de comunicación.
Así, la divisa paralela volvió a superar en más del cien por ciento la diferencia respecto a la cotización del dólar oficial, con lo cual se revierte la tendencia a la baja que la brecha había comenzado a registrar desde finales del año pasado.
“El gobierno intervino en el mercado de bonos con un mayor volumen para frenar la suba de los dólares financieros y aunque la intervención no frenó la suba de los distintos tipos de cambio, al menos logró suavizarla”, explicó Neffa.
A las preocupaciones de tipo estructural “se suma la incertidumbre política y económica y la aceleración en la inflación”, añadió el economista.
El último Índice de Precios al Consumidor (IPC) difundido oficialmente reveló que en marzo los precios de los bienes y servicios en Argentina aumentaron un 7,7 por ciento, todo lo cual añade tensión a las expectativas.
Al respecto, Neffa indicó que “la suba del dólar es la consecuencia de un momento político y económico complicado, no la causa, pero la misma aceleración del dólar trae en consecuencia una mayor inflación de cara a las elecciones, por lo que perjudica el poder adquisitivo y los costos de muchas empresas en la compra de insumos para la producción”.
Consultado por los programas de incentivo al sector agropecuario, que incluyen un tipo de cambio diferencial para garantizar liquidación de divisas, con el fin de aumentar el nivel de reservas, Neffa indicó que aunque “lógicamente un aumento en las reservas genera un menor impacto en el precio del dólar”, este escenario cambiaría con un aumento del dólar.
“Si el precio del dólar se incrementa, probablemente muchos agroexportadores no liquiden lo que tenían pensado, y esperen a liquidar un precio más alto y no al tipo de cambio diferencial de 300 pesos que está habilitado por tres meses”, indicó.
El economista contempló varios escenarios de cara a las elecciones presidenciales, entre los cuales destacan bajos niveles de reservas, alta inflación y la necesidad de negociar y cumplir las metas con el FMI, incluyendo los objetivos fiscales que se dificultan ante las consecuencias dejadas por la sequía. Fin